Sabes que tienes ese antiguo microondas guardado, el chaquetón de la nieve o la caja de herramientas. Pero, ahora, aparece el problema: se encuentran en alguna parte de tu trastero. Para evitar que este espacio de almacenaje se convierta en una especie de agujero negro, te damos una serie de consejos para organizar tu trastero.
Si todo se encuentra perfectamente organizado, bajar a buscar esos apuntes que tenemos que recuperar o la caja de disfraces para carnaval será mucho más fácil. Ordenar correctamente nuestros objetos en cajas, gavetas y estanterías es la clave: te damos algunas nociones básicas de cómo hacerlo.
Estanterías a tu medida
Las estanterías son el mueble rey de los trasteros. Nos permite aprovechar al 100 % cada una de sus baldas e incluso incorporar cajas y gavetas para las piezas más pequeñas. Te recomendamos que escojas un modelo robusto para tu trastero, como las estanterías metálicas que podrás encontrar en Ractem, una tienda online especializada que lleva la calidad industrial al hogar.
Las estanterías son perfectas para aprovechar el espacio verticalmente. Eso sí, es preferible no contar con estanterías demasiado altas para el hogar, a no ser que estemos habituados a utilizar la escalera y la solamos tener a mano.
Aplica tu método de ordenación
¿Tienes una forma establecida de ordenar tu trastero, garaje o el hueco de debajo de la escalera? Si la respuesta es no, todavía estás a tiempo de cambiar ese hábito y conservarlo para siempre. Depende de las cosas que guardes, te recomendamos dos formas de hacerlo: según la frecuencia de uso y según la temática.
Ordenar por frecuencia de uso
Coloca las cajas con los objetos que utilizas de forma más habitual en la parte delantera y las que no sueles usar en la parte trasera de las estanterías o en la parte superior. Este método es muy útil también para ordenar la ropa de temporada: por ejemplo, cuando llegue el verano ya podremos colocar las cajas con los enseres de invierno en las posiciones más alejadas.
Ordenar según temática
Otra forma de ordenar es según la temática: la típica caja de juguetes, de adornos de Navidad, decoración de Halloween, libros, juegos de mesa… Igualmente, trata de dejar lo más accesible posible esos materiales que usas habitualmente.
Utiliza etiquetas
Y, utilices el método que utilices, ¡no olvides las etiquetas! Parece una tontería, pero a no ser que utilices cajas trasparentes, no podrás saber qué hay en cada caja. Y finalmente, abrir una por una para ver qué contiene, no es lo más eficiente. Pon las etiquetas en el lado visible de la caja con la información del contenido.
Cuanto más concreto seas, mejor, sobre todo en las cajas en las que hay muchas cosas diferentes: puedes enumerar todos los objetos que contiene. Es sí, asegúrate de que lo que has escrito en las etiquetas sea perfectamente visible.
Aprovecha cada centímetro
Trata de incorporar muebles que se adapten a la medida del espacio con el que cuentas. Encontrarás estanterías y armarios de diversas dimensiones que encajar bien, sin necesidad de encargar un mueble a medida. Además, trata de que las baldas de tus muebles sean configurables a diferentes alturas para que puedas guardar cajas y objetos de todas las dimensiones.
Si tienes un mueble bajo, una lavadora o una mesa de trabajo puedes incorporar unos estantes en la parte superior que te permitan aprovechar también esa altura.
Elementos de ordenación
Además de las imprescindibles estanterías y las típicas cajas de cartón, ¿qué otros elementos podemos utilizar al ordenar el trastero? Existen decenas de opciones, ¡el mundo de la ordenación es inmenso!
Cajones para estanterías
Están ideados especialmente para colocar sobre las baldas de estos muebles. Suelen contar con separadores para poder clasificar mejor los materiales que contienen.
Gavetas
Son unas cajas normalmente de plástico con una apertura frontal que permite un fácil acceso a los utensilios guardados, sin necesidad de extraer la caja. Lo ideal es que sean apilables para ahorrar espacio.
Armarios de tela
Los armarios de tela son una solución práctica y económica para guardar ropa, generalmente colgada. Lo ideal es que cada prenda esté envuelta en una funda de plástico que la proteja.