A veces un pequeño cambio en alguna zona de la casa nos lleva irremediablemente a tener que cambiar algo más, aunque en ocasiones sea necesario. Por ejemplo, vas a la tienda y encuentras un mantel para le mesa de la cocina que te parece ideal y super mono. Conjunto con los muebles y con la decoración y además tienes ganas de darle un cambio a un estilo quizá más apagado a la habitación, llega la primavera y esa es una buena excusa para inundar la mesa de color.
Bien, compras el mantel y te das cuenta que al ponerlo en la mesa ya no pega con las sillas. Vaya contratiempo. ¿Entonces que hacemos? Podemos cambiar el mantel pero si de verdad queremos hacer el cambio podemos tapizar las sillas nosotros/as mismos.
Vamos a la tienda, compramos un trozo de tela igual o parecida a la del mantel y nos disponemos a tapizar. Es muy sencillo, sólo tenemos que seguir las instrucciones que veremos en el vídeo a continuación y tener las herramientas adecuadas, básicamente tijeras y una grapadora especial para tapizados.
