Las persianas venecianas son elementos muy indicados para cubrir todo tipo de ventanas por sus favorables prestaciones. En este artículo queremos explicarte sus características más destacadas, dónde puedes colocarlas y los tipos más demandados en el mercado.
¿Qué es una persiana veneciana?
La persiana veneciana aportará una elegante decoración a cualquier estancia, además de ofrecerte una óptima funcionalidad. Tienen la particularidad de dejar pasar la luz con un encanto especial, gracias al manejo personalizado de sus lamas.
Mediante un cordel, podrás subirlas o bajarlas y, con las varillas que incorpora y que actúan de guía para regular el ángulo, será muy sencillo girarlas para que entre más o menos claridad. Las venecianas pueden estar fabricadas con diferentes materiales, pero nosotros recomendamos elegir madera o aluminio.
Aunque, a primera vista, su nombre parece indicar que son originarias de Venecia, realmente fueron los persas los que las introdujeron en Europa, pero como lo hacían a través del puerto de esta ciudad, se dieron a conocer con esa denominación. No obstante, como dato adicional especificaremos que la patente se registró en Londres en 1769.
Ventajas de las persianas venecianas
Te aportarán una satisfactoria intimidad, pero no te privarán de la luz natural, como ocurre con las cortinas opacas. Además, como no es un producto textil, no aparecerán los molestos ácaros.
En habitaciones donde tengas que controlar la entrada de luz, por ejemplo, en habitaciones infantiles, fomentarás que los niños tengan un despertar agradable. En el salón, evitarás los incómodos destellos que suelen aparecer a algunas horas, pero sin renunciar al aprovechamiento de la entrada de luz natural.
En el mercado encontrarás una gran variedad de modelos. Puedes elegir colores lisos o dar un toque personalizado con lamas estampadas o decoradas con originales papeles pintados, entre otras opciones.
Otra gran ventaja es que, en época de calor, este producto te permitirá mantener una óptima temperatura porque bloqueará el paso de los rayos de sol, sin impedir que la circulación del aire siga en movimiento al dejar la ventana abierta.
Tipos de persianas venecianas
Tal y como hemos mencionado anteriormente, los tipos más comunes, en relación al material de fabricación, son aluminio y madera. Dependiendo de la zona donde vivas, así será conveniente que elijas un tipo u otro. Ambos tipos ofrecen similares características en relación al uso y control de luz y privacidad, diferenciándose en el acabado.
Por otro lado, y aunque suelen utilizarse lamas horizontales, también puedes optar por las verticales que funcionarán a modo de cortina. En este caso, las lamas se plegarán de derecha a izquierda, en vez de hacia arriba o abajo como las horizontales, y cuando quieras retirar la persiana para dejar el ventanal abierto, se recorrerá hacia los lados.
¿Cuándo elegir madera o aluminio en mi persiana veneciana?
Si vives en un clima húmedo es preferible que apuestes por el aluminio porque este elemento es totalmente resistente frente a la climatología adversa. La madera, por el contrario, es más recomendada para climas secos y cálidos.
En referencia al tema estético, te aconsejamos que elijas persianas venecianas de madera para espacios cálidos y acogedores, como en ambiente rústico, y las de aluminio para decorar oficinas o si tu vivienda tiene un estilo contemporáneo y moderno. Otro lugar ideal para colocar las persianas venecianas de aluminio es en la cocina porque te resultará muy sencillo retirar la grasa acumulada en las lamas y no cogerá olores.
Resaltaremos que, tanto si eliges madera como aluminio, tendrán un mantenimiento muy simple, ya que con un trapo húmedo quitarás la suciedad acumulada fácilmente. En el caso del aluminio puedes añadirle algún producto multiusos, pero en el caso de la madera tienes que revisar que tenga pH neutro para que no la dañe.
¿Qué debes tener en cuenta a la hora de instalar este tipo de persianas?
Es imprescindible que revises el modo de apertura de la ventana donde quieras colocar tu persiana. Si tu ventaja es abatible, deberás instalar la veneciana, aproximadamente, de 7 a 15 cm por encima de ella para que puedas abrirla sin que la persiana se convierta en un estorbo. En el caso de que tengas ventanas correderas, sí que podrás colocar la veneciana en el límite de la ventana porque no afectará a su apertura.
No obstante, y como recomendación, lo ideal es que tu persiana mida 20 cm más que el ancho de tu ventana, dejando 10 cm por cada lado, para que al mirar en diagonal puedas ver el exterior. Si tu ventana está retranqueada y dispones de un marco interior, podrás colocarla justo en el hueco haciendo que, además, añada un gran valor estético a la estancia.
En conclusión, las persianas venecianas son un clásico que nunca pasará de moda y ofrecen la solución perfecta, tanto decorativa como práctica, a la hora de cubrir ventanas.
